Realmente quieren acabar con la contaminación o ¿enriquecerse con los recursos de todos?

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Realmente quieren acabar con la contaminación o ¿enriquecerse con los recursos de todos?

 

          El calentamiento global de la Tierra es una realidad y Euskal Herria ya está sufriendo sus consecuencias. El aumento de la temperatura media del planeta provocará que 40 municipios de Euskal Herria, en los que residen el 80% de la población, se verán afectados por fenómenos climáticos extremos en los próximos años: inundaciones, subidas del nivel del mar y olas de calor. Por consiguiente serán las clases medias y bajas las que sufran los efectos devastadores del cambio climático, mientras el sistema capitalista y la clase burguesa continuará especulando con los recursos naturales del Plantea Tierra. 

          El territorio que está conformado por las siete provincias que integran nuestra nación, Euskal Herria, no están  ajenas al problema del calentamiento global. Ya se ha constatado que el nivel medio del mar ha subido siete centímetros entre 1992 y 2020, a un promedio de 2,8 milímetros anuales. Y las previsiones auguran un agravamiento  de este fenómeno en los próximos años, si no actuamos pronto y nos unimos en las luchas que se han mantenido siempre no nos salvaremos de un desastre ya anunciado ni en el pasado ni hoy en día.

          En Euskal Herria vivimos tiempos convulsos. Históricamente la lucha contra la especulación energética ha contando con un referente victoria y ha sido el ejemplo de Lemoiz. La central nuclear ha dejado para la historia cómo el pueblo puede vencer a los intereses de la clase burguesa. La sociedad vasca, liderada por el movimiento ecologista y con el respaldo de ETA logro parar el proyecto nuclear que ponía en riesgo su salud y una de las comarcas emblemáticas de EH.

          El movimiento ecologista en Euskal Herria tiene sus raíces en la lucha contra la central nuclear de Lemoiz encarnada en ETA y movilización del pueblo vasco. El enfrentamiento de una nación en contra de un estado y los intereses capitalistas y especulativos con los recursos naturales de la nación vasca. Ya se cumplen 40 años de un movimiento ejemplarizante y de referencia para generaciones futuras. Al grito de: “Lemoiz apurtu!!!”

 

          La central que sufriría tantos ataques de ETA y la presión de la nación vasca no llegó a estar nunca operativa,  fue una de las grandes victorias sobre la opresión del estado españo

UN ACCIDENTE EN LA CENTRAL NUCLEAR GAROÑA

IMPLICARÍA LA EVACUACIÓN DE CASI TODA EUSKAL HERRIA.

          Garoña es el paradigma de la especulación energética. Esta central nuclear fue inaugurada en 1970, es la más antigua del estado español y una de las más antiguas de Europa. Por su tecnología y edad, es gemela al reactor 1 de Fukushima, el que más daños ha sufrido. 

  

           La sobrexplotación de los recursos energéticos y de las materias primas está suponiendo una amenaza para la vida en la Tierra. La sostenibilidad del ecosistema está en venta por multinacionales y los referentes del sistema capitalista: EEUU, Europa, etc. El conflicto global por los recursos naturales se libra en bloques entre el capitalismo de EEUU y el “comunismo” Chino, enfrentados por el control de los recursos naturales y las materias primas.

           El capital esta priorizando sus intereses económicos a la sostenibilidad del medio ambiente y el uso de recursos naturales.

Alternativas ecológicas y sostenibles a la energía nuclear

          El modelo energético de las ciudades se ha basado tradicionalmente en el uso de energías NO RENOVABLES y  en menor medida y desde hace algún tiempo, en las energías renovables (pero aún es insuficiente). Los recursos son bienes de primera necesidad en el actual sistema capitalista en el que vivimos, y no olvidemos que le pertenecen a la madre tierra.

          La clase obrera explotada por el imperialismo capitalista se encarga de la obtención de esos recursos energéticos no renovables, para las grandes empresas energéticas y mercantilizar con sus medios para empobrecer y someter a una nueva generación.

           Hoy se necesita un nuevo modelo social basado en recursos sostenibles gestionados por el proletariado. Alternativas ecológicas: eólica, solar e hidráulica al servicio de todos y para todos. 

 

 

La otra huella del Covid-19: La contaminación, en mínimos históricos

 

          Es una de las grandes lecciones que nos está dejando la alarma sanitaria provocado por el coronavirus en Europa, especialmente en  estados europeos. Reducir los desplazamientos innecesarios y cesar la actividad industrial (excesiva que nos hace ser esclavos de un sistema capitalista que los únicos beneficiados son las grandes fortunas y la burguesía porque los ricos son cada vez más ricos y la clase obrera trabajadora mas empobrecida y precaria), aunque sea solo unos días, deja esta huella en nuestra atmósfera.

Las emisiones se desploman

          Lo vimos hace solo unos meses en uno de los rincones más contaminados del planeta, la China más industrial, pero ahora con la llegada del COVID-19 a nuestro continente, el espacio que aparece más libre de humos que nunca, es el europeo y en el mapa que te mostramos aquí, especialmente el de Italia.

 

Conclusión

                La historia se repite una vez más: “la clase burguesa antepone sus intereses económicos poniendo en riesgo la vida de los trabajadores”. La amenaza del Covi-19 ha puesto en evidencia como ante el riesgo del sistema de producción, la patronal ha preferido poner en riesgo la salud de la sociedad para que el sistema capitalista siga adelante y no estalle en una recesión. La patronal con la complicidad de los intereses partidistas de políticos está sometiendo a la clase proletaria, como un nuevo modelo de esclavitud.

Tomando de referencia la lucha contra la central de lemoniz la nación vasca debe seguir luchando y el proletariado jamás rendirse antes los poderes capitalistas burgueses del estado.

GORA EUSKAL HERRIA LIBRE ETA ASKATUTA

 

Eukal herrian, 2020ko apirilak 6

                                                                                                                                                             Eguzki.B

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