Alienación de género y plusvalía sexual

“El comunismo será aquella sociedad en que amor solo se cambie por amor” (k. Marx)

La simpleza de calificar a Marx de joven aún hegeliano por sus Manuscritos de París de 1844 sólo puede explicarse por el desconocimiento de estos textos, conocidos a través de Riazanov en los años 30 así como los recién descubiertos del “Marx tardío” de 1878. Los que afirman esto no pueden admitir realidades como plusvalía ideológica y plusvalía sexual, caen en el mecanicismo economista prefiriendo ver pasar la historia que harán los demás. 

 Cualquier intento de abordar realidades que evidentemente están imbricadas en el modo de producción de la sociedad, tienen, por supuesto, connotaciones sensibles y particulares. Y desde nuestra posición alternativa pretendemos explicar la relación entre el patriarcalismo y demás dominaciones del sistema preparando la batalla para arrancarlas raíces y cabeza del sistema capitalista que todo o invade con sus ideas, métodos, leyes y sueños virtuales.

La alienación principal se fundamenta en la sistemática separación de los productores directos (trabajadores) y sus medios (herramientas) y objetos de trabajo (tierra, agua etc.) y proyecto.

 Ese acto inicial, conlleva a derivaciones importantes como: la expropiación del fruto del trabajo propio y el divorcio entre el conocimiento del proceso productivo y el productor. Así, el trabajador despojado de bienes es forzado, so pena de perecer de inanición, a venderse como una mercancía de quien lo desee explotar. De esa forma, la gente se enajena, se vende a otra por un período determinado de tiempo para que el “jefe” disponga de su vida a plenitud disponiendo, cómo, dónde y cuándo trabajar para beneficio del explotador. Y finalmente se produzca la definitiva inversión (sujeto-objeto) que pone al trabajador de rodillas ante la riqueza que produce.

Es en base a este proceso como se construye ideología, estructura político-institucional, falsa ética y leyes serviles que diseñan un mundo al servicio de la dominación en que resistimos los dominados. Y las relaciones sociales, interpersonales y por supuesto las actividades de sus componentes de clase son interferidas por la ideología y demás componentes de la dominación.

Pero, esta relación de alienación en el trabajo y alienación ideológica diseñada en los talleres ideológicos del sistema diseñan las relaciones que integran la totalidad social.  Es el modelo que recurre desde la ideología de propiedad en manejar su mundo (el nuestro) utilizando la mercancía mujer en la reproducción humana, y en demás procesos de producción utilizada como objeto-valor de cambio

Así en HEGOEUSKALHERRIA las mujeres producen el 60% del PIB (trabajan en casa y afuera). A igual curro gana un 30% menos que sus compas machos y su participación en el trabajo asalariado es próxima al 40%...

Plusvalía ideológica

La extracción de plusvalía en proceso de producción es viene acompañada, hasta hoy de forma poco desarrollada con la extracción de plusvalía silenciosamente y progresivamente introducida a la vez que pasivamente asumida socialmente.

Es el proceso de dominación del sistema creando un “mundo feliz” para “los pocos” (dominantes) y sus cipayos y desgraciados para la casi totalidad de los humanos.

Lo realmente grave de esta gran mentira de mundo feliz, es la imbecilidad ignorante con que grandes mayorías de explotad@s lo asumen en su enajenación como el mejor o,al menos, como el único mundo posible. Todo ello supone la mejor propaganda de las “nuevas” (eternas) formas de enajenación y opresión de mujeres y hombres en nuestro tiempo y espacio.

El patriarcalismo desde un poco más allá del origen de los tiempos ha empalmado con los esclavismos, de pueblos y todas las formas de opresión (guerras, marginaciones…explotación de seres humanos y destrucción de la tierra-madre). Siempre en el fondo de este cuadro que relata la historia de la humanidad esta esa “lucha de clases” entre quienes dominan (la santa propiedad) y quienes reconocen su identidad luchando por ser libres. 

En la La Crítica de la Ideología (Marx-Engels) se analiza cómo las ideas de la clase dominante son las ideas que se reproducen en la sociedad y el desarrollo de estos planteamientos constituye la falsa conciencia; la que constituye ese mundo fundamentado en su Ideología, que llaman sentido común; y que fundamenta todas las formas de alienación a través de la historia.

Es urgente iniciar y desarrollar el conocimiento (ciencia frente a ideología) de nuestra realidad y la consecuente lucha ideológica y sucesivas luchas libertarias para construir otro mundo; si aún es tiempo.

Plusvalía sexual o cuando la explotación elimina el último valor

Recordaremos que “El capitalismo no suministra a sus hombres cualquier ideología, sino concretamente aquella que tiende a preservarlo, justificarlo y presentarlo como el mejor de los sistemas posibles”

Por eso, admitimos ingenuamente grandes “aspectos laterales” (¡Ojo!) de esa realidad social que son pura ideología burguesa que nos llevan a admitir el trabajo asalariado, las razones de la propiedad y del estado y la normal dependencia, lateralidad, marginación y consecuente sumisión de la mujer. Es lo que nos razona el sentido común de la dominación.

ALIENACIÓN SEXUAL

El patriarcalismo ha desarrollado a lo largo de milenios la primera ideología de opresión humana basada en la mujer como valor de cambio enclaustrándola en su apartheid con su rol de productora de valores fundamentales ya su vez enajenados a favor de la comunidad masculina que, en sus diversos niveles de conciencia han venido explotando su energía (sexual…de género) de acuerdo con la moral del grupo-clase dominante.

 Trabajo, reproducción, servicio sumiso y discreción obligada; han hecho de la feminidad a lo largo de la historia la principal moneda de cambio; incluso utilizando su energía sexual por los sectores proletarios, siempre impregnados por la ideología de la propiedad, y así ser compatibles y eficaces para la burguesía que en última instancia se enriquecen de y con la energía sexual de la mujer que En el escalafón queda reducida a “esclava de los parias de la tierra”.

Así en hego-Euskalherría   El 60% del PIB lo produce la mujer (¡), que por otro lado ocupa no más del 40% de los puestos de trabajo en los que percibe en torno a un 30% menos de salario que sus “compañeros” a igual trabajo. Y no entramos en su participación en puestos de mando. ¿Cuál es el grado de satisfacción?

Sería necesario estudiar que porcentaje de trabajo en casa es remunerado. Que trabajos producen más frustración ¿Quiénes se sienten más identificad@s con su vida. Solamente llegamos a percibir algunos números aproximados (?) de violencia doméstica.    

Como diría el marxista autor de “Capitalismo neurótico”: “La energía sexual utilizada neuróticamente por los proletarios incrementa el capital y el poder autoritario de la moral sexual burguesa. A mayor miseria sexual de las masas, mayor riqueza y arraigo de la “moral sexual conservadora” nacida de la propiedad.

Desde sus orígenes la acumulación capitalista ha sido bendecida por la moral que nace de “los elegidos como dueños del mundo”.

Y una gran mayoría de explotados acepta la degradación de la mujer la represión sexual, la persecución a la homosexualidad y el castigo a la imaginación sexual como naturales. Miserable ideología que frustra y disminuye las capacidades subversivas y políticamente independientes de los trabajadores. Todo un gran invento del sentido común burgués difundido por sus fábricas de producción ideológica.

Creo importante pasar inmediatamente de la fase resistiva del relato y compasión a la estrategia del proceso de liberación.

Espero que nadie que pretenda cambiar este mundo de raíz no entienda que al lado y más allá de la liberación nacional-social, la liberación la mitad insustituible de la población de E.H. y mundial-que realiza todo el trabajo que supone la reproducción de la vida, además de los otros, no sea considerada, como sujeto revolucionario fundamental.

Todo ese proceso de represión generada por el capital y los estados burgueses que blindan las relaciones de explotación y violencia, y configuran las relaciones sociales del mundo que dominan, incidiendo en todos los espacios.

Es así como penetran, en el plano sexual creando episodios de violencia doméstica, que devienen de las relaciones violentas en las cuáles se desenvuelve la sociedad en el proceso de producción, proyectando sobre las relaciones sociales las contradicciones, violencias y gastos de energía que corroen las relaciones del único entorno social (familia) productor de valores que no son de cambio y rompiendo su actividad, natural pacífica y liberadora. ¿Cómo inciden sobre las relaciones de género? Impidiendo la autonomía sexual y generando la mercantilización erótica.                         

                                                                      ... y mari (2017)

GEHIEN IRAKURRI

AZKEN BERRIAK