Mediante el presente comunicado, HERRITAR BATASUNA/Unidad Popular se reafirma en su decisión de mantener una posición a favor de la abstención activa y revolucionaria ante las elecciones que, en una situación de ocupacion militar española y francesa, se están celebrando en este 2019 en Euskalerria.
DE NUEVO,
¡ABSTECIÓN ACTIVA
Y REVOLUCIONARIA!
Mediante el presente comunicado, HERRITAR BATASUNA/Unidad Popular se reafirma en su decisión de mantener una posición a favor de la abstención activa y revolucionaria ante las elecciones que, en una situación de ocupacion militar española y francesa, se están celebrando en este 2019 en Euskalerria.
Los comicios del pasado 28 de abril, celebrados dentro del marco estatal español, mostraban de manera aún más evidente, tanto en la forma como en el contenido, su carácter opresor. En esta ocasión, las elecciones al Parlamento europeo se celebrarán en toda Euskalerria. Eso sí, Euskalerria continuará sin unidad nacional, negada y dividida entre España y Francia y, además, obligada a votar dentro de dos marcos estatales diferentes y extranjeros.
Toda independentista y socialista revolucionaria comprenderá fácilmente las razones que nos mueven a no legitimar mediante nuestros votos el plebiscito que la Unión Europea organiza para reforzar su opresión capitalista e imperialista. De esa Europa capitalista, militarista e imperialista no nos vendrá nada bueno.
Nosotras estamos por una Unión de Repúblicas Socialistas de Europa, en la que, bajo la dirección del internacionalismo proletario, también formará parte la futura República del Pueblo Trabajador Vasco de Nabarra, en igualdad y solidaridad, junto con el resto de Pueblos Trabajadores, en la construcción del Socialismo, y teniendo por horizonte la consecución de una sociedad libre, sin estado, ni clases, ni patriarcado. En todo el planeta.
Sin embargo, en el sur de Euskalerria nos encontramos ante las elecciones forales y municipales, las cuales se celebran en las mismas condiciones de ocupación militar, tal como la Guardia Civil ha vuelto a recordarnos recientemente en las calles de Iruña. A pesar de ello, los reformistas y autonomistas siempre han subrayado que se trata de unas elecciones para las instituciones más cercanas al pueblo, y que existen más posibilidades de cambiar las cosas si participamos en ellas. Es la vieja y viciada milonga de siempre.
Nosotras, en cambio, creemos que esas instituciones, esto es, tanto el Gobierno foral de Nafarroa Garaia, las Diputaciones de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, como los Ayuntamientos de las ciudades y municipios, todas ellas forman parte del entramado institucional español y, por lo tanto, son herramientas al servicio de la opresión del pueblo trabajador vasco. Tanto más peligrosas y alienantes, en cuanto que se encuentran más cerca del día a día de la clase trabajadora. Pues a través de esta cercanía es como se genera la falsa ilusión democrática que nos vende la burguesía a los y las trabajadoras. Lo único que se consigue en esas instituciones es gestionar la opresión y explotación contra los y las trabajadoras, de acuerdo al marco normativo jurídico-político impuesto por la oligarquía españolista. Unas veces de forma suave y otras de manera más violenta, pero dentro del sistema capitalista y de una situación de subordinación nacional.
Así, desde las instituciones autonómicas españolas es imposible alcanzar la Independencia, y menos aún el Socialismo, tal y como ha quedado claramente de manifiesto en Catalunya. Las banderas españolas que cuelgan de los ayuntamientos nos lo recuerdan todos los días: nuestra opresión nacional y social.
En este sentido, nos reafirmamos en lo que ya manifestamos en un comunicado anterior: “No es una cuestión de partidos, ni de convocatoria de elecciones, de lo que se trata es de poner patas arriba todo el sistema imperialista. Esa es la lección que cabe extraer de los últimos 60 años. No hay nada que negociar con la oligarquía francesa ni con la española. No existen etapas intermedias. No es posible la unidad nacional, ni siquiera una alianza estratégica con la burguesía nacional vasca. Es la clase trabajadora vasca quien tiene que dirigir la liberación naconal y social del pueblo trabajador vasco. No habrá libertad para el pueblo trabajador vasco dentro de la legalidad de esos dos estados conquistadores, colonizadores, capitalistas e imperialistas. La participación en sus instituciones autonómicas no nos traerá ni la independencia, ni el socialismo, ni la reeuskaldunización, ni el feminismo, ni la reunificación de los territorios de Nabarra. Los y las trabajadoras vascas jamás seremos libres en el marco opresor de esas dos cosnsituciones burguesas, patriarcales y etnicidas. Es imposible.”
Somos conscientes de que, hoy por hoy, nuestra posición es muy minoritaria en la clase trabajadora vasca, y de que la mayoría de ese proletariado se mueve dentro de la lógica reformista, en todas sus variantes y expresiones, desde Unidas-Podemos al PSOE, en el espectro ideológico españolista, o desde EHBildu al PNV, en el autonomista. Cuando no se tiene perspectiva de una revolución socialista, la única esperanza que se alberga es la de las reformas dentro del sistema. Esto es, pequeñas mejoras, en cualquier caso de caracter cosmético, superficiales.
Las elecciones, en resumidas cuentas, no son sino una disputa entre los partidos del sistema, para determinar cuál de ellos será el que se lleve el mayor trozo de la tarta de las subvenciones y gestione de manera más eficaz la opresión del capitalismo. En los comicios burgueses, en definitiva, lo que se decide es la forma que revisten las cadenas con que nos atan, no así la destrucción de esas cadenas de una vez y para siempre.
HERRITAR BATASUNA se niega a sumergirse en esa lógica reformista. Nosotras queremos sostener en alto y firmemente la bandera roja de la Revolución Socialista Vasca. Pretendemos mantener viva la perspectiva liberadora, revolucionaria y emancipadora, y para ello nos dirijimos con la verdad por delante, por muy amarga que ésta resulte, al pueblo trabajador vasco y, especialmente, a su proletariado.
Ahora bien, sin formación, ni organizacion, ni voluntad firme para luchar, ni determinación para recuperar el poder político y económico mediante la Revolución Socialista, la abstencion pasiva y apolítica supone un terrible suicidio para la clase trabajadora vasca, máxime en estos tiempos de auge del fascismo. Es algo que entiende cualquier trabajadora y trabajador, y es por ello que han acudido de forma masiva a dar su voto a las opciones reformistas y autonomistas.
Desgraciadamente, lo que la mayoría de los sectores de esa clase trabajadora no han comprendido ni aprendido de su experiencia práctica es que, ante el miedo al fascismo, votar a favor de los reformistas y autonomistas no va a solucionar nada, porque con ello no se conseguirá cambiar ni la lógica ni las leyes implacables del sistema capitalista. El reformismo autonomista no será capaz de lograr ninguna conquista importante para el proletariado, puesto que los innumerables y diferentes representantes de la socialdemócracia únicamente se limitan a gestionar obedientemente los intereses del capital, eso sí, aplicando un barniz progre, liberal y postmoderno. Se trata, en última instancia, de recetar mayores dosis de anestesia y alienación para adormecer a los y las trabajadoras.
Es necesario que tengamos claro que tanto las derechas, la conservadora y la fascista, como las izquierdas, en sus versiónes socialdemócrata y/o “radical”, ambas constituyen los dos flancos del sistema, y que, por consiguiente, se sitúan dentro de la lógica del capitalismo. A este respecto, el ejemplo más ilustrativo lo encontramos en Grecia con Syriza.
En los próximos años, la clase trabajadora vasca podrá vivir esa misma dolorosa experiencia de manos de Unidas/Podemos y EHBildu, pues se limitarán a gestionar el sistema, sin provocar ninguna ruptura en su seno, negociando junto con el PNV y el PSOE un nuevo Estatuto vascongado dentro del marco constitucional español. El pueblo trabajador vasco seguirá sufriendo la opresión y la explotación como hasta ahora: miseria, precariedad, accidentes laborales, patriarcado, etnocidio, ocupación militar, paro, recortes sociales, consecuencias del cambio climático y un largo etcétera.
Nosotras nos situamos en otra lógica, a saber, la de la Independencia, el Socialismo, la Reeuskaldunización y la Reunificación nacional. En la lógica del Feminismo y el Ecosocialismo. En la lógica de la destrucción del Capitalismo en Euskalerria y el resto del mundo, y en la lógica la implantación de la Democracia proletaria. En la logica de la independencia política y estratégica de la clase trabajadora, en un planeta libre sin clases, ni estados, ni patraircado. En la lógica de la Revolución Socialista.
La situación de Catalunya nos muestra que, dentro del actual sistema imperialista, las burguesías de las naciones oprimidas no tienen ni la fuerza ni la intención necesarias para llevar el proceso de liberación nacional hasta sus úlitmas consecuencias, y que únicamente el pueblo trabajador, la clase trabajadora asumiendo el protagonismo y la dirección, puede conseguir la independencia mediante la revolución socialista, a la vez que darle a la nación un caracter y forma proletarias.
Ese es nuestro camino: recuperar la independencia de Euskalerria y alcanzar la independencia política del proletariado vasco. Ya que, en nuestra opinión, ambas independencias son una sola. La una traerá la otra. La independencia estratégica del proletariado vasco de las diferentes burguesías autonomistas será la que posibilitará la victoria de la Revolución Socialista Vasca. Y no albergamos la más mínima duda de que sólo mediante la Revolución Socialista es como la clase trabajadora vasca logrará sus objetivos nacionales: Independencia, Reeuskaldunización y Reunificación nacional.
Las situaciones de Venezuela, Palestina, Yemen y Siria nos muestran, de un lado cómo se va agudizando la lucha de clases en todo el mundo y, de otro, que nos encontramos a las puertas de la III Guerra Mundial a causa de la ofensiva global del imperialismo. No hay nada que negociar con el Capitalismo ni con el Imperialismo. Ellos o nosotras. No existen términos medios. En ese sentido, y dado el actual contexto geopolítico, pensar que la liberación nacional y social del pueblo trabajador vasco se lograrían mediante elecciones y vías pacíficas nos parece que no es más que un espejismo a la vez que un desastre.
La Revolución Vasca se sitúa a la cabeza en el frente de lucha y resistencia antiimperialistas. ¡Hasta la victoria! Somos plenamente conscientes de que esto será difícil y muy duro, y de que resulta mucho más cómodo pedir el voto en la creencia de que así todo se solucionará fácilmente. Pero no dejan de ser falsas promesas electoralistas. Son los eslóganes típicos de los oportunistas.
Por todo ello, tras realizar un análisis concreto de la realidad concreta, y sin que en un futuro descartemos otras opciones revolucionarias, HERRITAR BATASUNA se reafirma en su decisión de promover la abstención activa y revolucionaria para el ciclo electoral de este 2019, a la vez que hace un llamamiento a los y las trabajadoras a que se formen, se organicen y luchen en aquellas organizaciones que consideren oportuno, y en especial en las de la Izquierda Independentista Revolucionaria. ¡Organicémonos!
Para que la abstención activa y revolucionaria resulte auténtica, exije necesariamente de una firme decisión de organizarse. Hemos comenzado a construir el Movimiento Socialista Revolucionario Vasco de Liberación Nacional, y necesitamos el compromiso militante de los y las trabajadoras revolucionarias en sus diferentes organizaciones. Es el trabajo y la lucha del dia a día. Si en estas elecciones has tomado la decisión de abstenerte, y si has leído el presente comunicado hasta este último párrafo, sólo nos resta decirte una cosa más:
FORMACIÓN, ORGANIZACIÓN Y LUCHA, A FAVOR DE LA REVOLUCIÓN SOCIALISTA VASCA.
¡LA LUCHA ES EL ÚNICO CAMINO!
¡HASTA LA VICTORIA!